Con afán de contener la escala del dólar, el BCRA volvió a intervenir el mercado. La divisa estadounidense oficial cerró a $1.515.
El Banco Central de la República Argentina (BCRA) se vio forzada a intervenir en el mercado este martes, marcando su primera participación activa en más de un mes. El objetivo fue contener la presión alcista sobre la divisa estadounidense. Cabe señalar que el dólar oficial minorista escaló $20, cerrando a $1515 en el Banco Nación. El mayorista, por su parte, subió $15 y terminó la jornada en $1490,50, casi rozando el límite de la banda cambiaria.
Ante este escenario, la autoridad monetaria rompió una racha de 21 días sin participación activa y volvió al ruedo. Esta intervención se produce días antes de las elecciones legislativas y justo después de formalizarse el swap de US$20.000 millones con el Tesoro de Estados Unidos para reforzar las reservas, que cerraron en US$40.539 millones.
El Banco Central formalizó la finalidad de su reciente acuerdo, explicando en un comunicado que se trata de "un acuerdo de estabilización cambiaria, que busca contribuir a la estabilidad macroeconómica de la Argentina, con especial énfasis en preservar la estabilidad de precios y promover un crecimiento económico sostenible".
El apoyo de Estados Unidos se hizo explícito este martes cuando el secretario del Tesoro norteamericano, Scott Bessent, no solo defendió la línea de swap, sino que también ratificó su respaldo al Presidente. Bessent calificó de "cruciales" los "esfuerzos de Milei para revertir las décadas de declive de su país, derivadas del izquierdismo radical del peronismo".
Asimismo, el funcionario estadounidense dejó claro el propósito del acuerdo al plantear que: "La Argentina ahora tiene la oportunidad de alcanzar la libertad económica, y nuestro acuerdo de estabilización es un puente hacia un futuro económico mejor para Argentina, no un rescate".
En un movimiento simultáneo, el Gobierno argentino reveló una estrategia para reorientar el gasto público. El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, anunció un plan de recompra de bonos de la deuda destinado a impulsar la inversión en educación. La operación, denominada "Deuda por Educación", implica la recompra de deuda soberana argentina en el mercado para luego sustituirla por financiamiento con tasas de interés más bajas.